Visión CR

Libros, libros y más libros

Nivaria Perera

Bajo una morrocotuda gripa, influenza o que se yo atacada casi por dos semanas sin ser el virus pandémico me llevo, como otras tantas veces, a refugiarme en la lectura, cuando los ojos llorosos para no salir de mi habitación y contagiar a otros en la familia. Me resulto enriquecedora y gratificante la lectura. Me encontré que tenía un delicioso texto Historia de la lectura en el mundo occidental, publicado por Taurus, bajo la dirección de Guglielmo Cavallo, Roger Chartier, Robert Bonfil, y una veintena de destacados profesores de las más variadas profesiones como de reputadas universidades del mundo occidental.

La lectura, ese placer por los textos de aquí y de allá, de las más variadas argumentaciones y estilos en prosa, verso, cuento, novela, ensayo o los micros, tan de moda actualmente y que fascinan a las nuevas generaciones, es un mundo sin fin. Nos pasean por la Historia y las tendencias actualizándonos y llenándonos de saberes y hasta anécdotas.

Guglielmo Cavallo, Roger Chartier, Robert Bonfil nos llevan de paseo por el mundo griego y helenístico, pasando por Roma y la Edad media con su contraste total con la Edad Moderna, de una forma que nos vemos refundidos en un momento en una lectura pública para pasar al silencio de las bibliotecas oscuras y silenciosas del medioevo entre faldas de monjes.

No podía faltar una vistada por Robert Bonfil a la lectura en las comunidades hebreas en el mundo medieval donde el libro y la lectura ocupan un lugar de gran importancia en el espacio ciudadano.

Los autores nos enfrentan a una verdad que nos hace reflexionar hondamente. Leer uno o varios textos en voz alta o en silencio, ya en solitario o en público de un manuscrito o frente a la pantalla de nuestra Tablet o portátil, equivale a recrear, el regalo del autor, de acuerdo con nuestras propias competencias y expectativas.

Un texto, de ahí su gran riqueza en tanto me dice mucho o poco a otros les dirá más, muchísimo más o nada. Y, es en este punto que los autores nos aclaran que los libros son en sus diversas formas la Historia de la Humanidad. Son los mejores testigos de un mundo que nace y otro que muere y su complemento. Son fieles testigos fieles de los gestos, costumbres, olores y sabores del momento histórico que vibra en su ser y en la sociedad del momento. Son los verdaderos guardianes de ese maravilloso regalo de los dioses, la palabra.

Libros en la Benemérita Biblioteca Nacional

Bajo el auspicio de la benemérita institución fue presentado a la sociedad costarricense el libro del exembajador de Colombia en Costa Rica, Angelino Garzón, que bajo el título de “Reflexiones e iniciativas de vida que recoge sus experiencias de político y diplomático -y sobre todo de ser humano- quele lleva a decir que todo momento vivido tiene una riqueza imperecedera.

Angelino Garzón

Garzón fue vicepresidente de Colombia y acaba de retirarse de su vida diplomática, luego de haber cumplido con su labor en nuestro país, donde ejerció su representación diplomática por varios años.

El acto fue una combinación de artes. No sola la letra impresa estuvo presente, sino el guitarrista costarricense Roberto Víquez y la cantante colombiana Fatiniza, ofrecieron con gran maestría sus dones musicales, todo su arte. Los asistentes revelaron que fue una tarde exquisita y llena de sabor latinoamericano que les proporcionó gran alegría y placer.

Y este jueves 21de julio se presenta la obra de Minor Arias Uva, Arteria ancestral, a partir de las cuatro de a tarde. Será una actividad presencial y virtual, desde el Facebook de la Biblioteca Nacional.

La nueva obra del Minor Arias es acuerpada por los autores nacionales Arabella Salaverry y Ronald Bonilla y se enmarca en el Festival Hojas sin tiempo, del grupo Poiesis.

Su nuevo poemario es dedicado a las historias ancestrales de las culturas indígenas de la región centroamericana.

El autor

Es uno de los poetas jóvenes que ha destacado por su trabajo de calidad y superación permanente: nació en Pérez Zeledón y su infancia la pasó cerca de la montaña, situación que le da una sensibilidad especial en sus escritos.  Estudio en Monterrey México donde obtuvo la maestría en Administración de empresas

En 1999 es reconocido con el Premio Carmen Lyra de la Editorial Costa Rica, por su poemario “Canción de lunas para un Duende”, publicado por la misma Editorial en el 2004. Además, tiene otras obras con la misma editorial:  Mi abuelo volaba sobre robles amarillos, Viaje al planeta Rojo, Huracán Otto, la noche que duró muchos días y Algunas Ranas de salto múltiple.

Releyendo a Gabo:

El amor en tiempos del Cólera y el presidente Chaves

La relectura de algunos libros, definitivamente, nos da nuevas visiones sobre la vida cotidiana de nuestra sociedad.

 Nos regalan nuevos mundos. Nuevos olores y hasta anécdotas de los personajes, esos hitos que nos atrapan a lo largo de toda la historia y hacen las delicias de la narración en la pluma de García Márquez en este caso y nos retrotraen a la realidad, a momentos actuales de nuestra cotidianidad, de la vida social hoy de nuestro país. En otros casos se han adelantado al tiempo y dan pie a un sinfín de hallazgos históricos y hasta científicos.

En mi más reciente  relectura, de El Amor en tiempos del Cólera, qué gran similitud hallé entre  Florentino Ariza , el personaje  delineado por la creatividad  del novel García Márquez, con el Presidente nuestro, el “ busca broncas”  tan intrépido y lanzado  con las mujeres como quedó expuesto en la reciente campaña electoral que le llevó al solio presidencial como el tímido , callado enamorado de Fermina Danza.

¿Cómo, por qué?

Nada menos y nada más en el pasaje que revela a Florentino Ariza, con un ceremonioso recuento por atesorar los nombres y faenas, escarceos con todas las féminas importantes en su vida de adulto, detallo en cientos de diarios, en miles de páginas los detalles de los encuentros y cuando murió el zar de la navegación del río Magdalena, le encontraron la serie de diarios, titulado Ellas.

“… cuando Fermina danza quedó libre de su condena sacramental tenía unos veinticinco cuadernos con seiscientos veintidós registros de amores continuados, aparte de incontables aventuras fugaces que no merecieron ni una nota de caridad”.

Pues, pues sí en la página 189, de la segunda edición del Grupo Norma, del 2007 hice el descubrimiento de la similitud. Y a saber cuántos hijos de Eva, andan por ahí cargando sus anecdotarios.

Pasmada quedé, la novela de Gabo del 85 de Gabo nos revelaba un tema que en campaña política recién vivida por los costarricenses levantó un polvorín que como todo en el país no pasa de ser una tormenta de tres días.

Leer con otros ojos, en otro momento, novelas, ensayos, cuentos y la misma Historia nos revela detalles inconmensurables de sus héroes, heroínas de nosotros como lectores inmersos en un momento diferente, viviendo otras realidades.

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